No he parado de llorar (internamente) desde que terminé el libro. Y puede que eso los asuste porque es lo que ocurre la mayoría de las veces cuando terminas un libro bueno. Pero no es por el final lo que me ha estado haciendo llorar (internamente) como si me hubieran puesto a picar cebollas por tres horas seguidas* sin misericordia. Es por lo maravilloso,...

¡Mogget es todo lo que soy en la vida! Es gracioso y ácido (especialmente con Touchstone...), solo piensa en comida y en tomar siestas entre esas comidas. No hace más que dar órdenes (disimuladamente, porque se supone que es un "sirviente") y hablar con exasperación porque NADIE NOS ENTIENDE, NOSOTROS SOLO QUEREMOS QUE NOS DEJEN EN PAZ. Pero no, Mogget...

Hay tres cosas que aprendí el mes de junio: 1) soy, oficialmente, un helado, así que si alguien quiere apoyarse en algo alguna vez, que no sea en mí porque lo más probable es que nos haga caer a ambos, 2) tal vez consumí mucho helado, puesto que me he derretido varias veces y aún sigo con vida... y 3) que ya era hora de traer este tipo de entradas al blog....